Precaución duraante el embarazo
Teratógeno para el embrión y tóxico para el feto, particularmente para su cerebro, el cero alcohol debe ser la norma durante el embarazo.
La guardia en alto por tanto sobre los riesgos del consumo de alcohol por parte de las gestantes.
Anualmente, el 9 de septiembre se celebra el día mundial de sensibilización sobre los trastornos causados por el alcoholismo fetal, para informar a la población general sobre un problema mayor de salud y prevenir el consumo de alcohol en las mujeres gestantes.
Es necesario que la gente conozca que el alcohol atraviesa libremente la placenta e impregna al feto.
El alcohol es teratógeno* para el embrión y tóxico para el feto, especialmente para su cerebro. El consumo de alcohol durante el embarazo no está exento de efectos perjudiciales.
El riesgo de provocar anomalías físicas es mayor, tal como es el caso del trastorno del neurodesarrollo en el niño, persistiendo en la edad adulta, constituyéndose en un factor de riesgo responsable del trastorno neuro evolutivo y de la aparición de trastornos cognitivos y comportamientos ocasionalmente muy severos.
El síndrome alcohólico-fetal es la forma clínica más completa del trastorno causado por la alcoholización fetal. Su aparición se halla totalmente correlacionada con la intensidad del consumo de alcohol.
Definición
- Teratógeno: producto o medicamento que administrado a una mujer o a un animal en estado de gestación puede ocasionar malformaciones en el feto.
Hay que insistir en la enorme responsabilidad e irresponsabilidad que encierra el ofrecer bebida alcohólica a las mujeres encinta.
Existen formas incompletas y menos específicas del trastorno por alcoholización fetal, por consumo poco intenso de alcohol.
Según estudios epidemiológicos de la Salud Pública francesa, se estima al menos que cada día nace un niño en Francia que presenta el trastorno, y, cada semana nace un niño presentando un síndrome alcohólico fetal. Las cifras son muy inferiores a la incidencia real, habida cuenta del insuficiente registro del consumo de alcohol durante el embarazo y la ausencia de seguimiento posterior al período neonatal de los niños expuestos intraútero.
Equipos experimentados
Por precaución conviene tener en cuenta que cualquier consumo (incluso mínimo),no es inocuo, no existe un consumo mínimo aceptable.
Para un producto teratógeno y fetotóxico, lo único recomendable y responsable es no beber alcohol desde que se proyecta un embarazo. Esta recomendación simple y universal es no beber alcohol es la que mejor se comprende.
En el año 2017, el 44% de los franceses, respecto al 25% del año 2015, declararon espontáneamente que no existe ningún consumo de alcohol sin riesgo para el niño. Probablemente se trata del resultado del impacto de la campaña realizada por la Salud Pública francesa a lo largo de 3 años:
“Usted bebe un poco, pero el bebé, bastante”
Un 21% de los franceses frente a un 27% en 2015 pensaban aún que no debe desaconsejarse beber una copa pequeña de vino de cuando en cuando durante el embarazo. Siendo el motivo por el que el Ministerio de Sanidad francés lanza la nueva campaña, que reza así:
“ Por precaución, cero alcohol durante el embarazo”.
En el momento actual, cada gestante debe preguntarse: ¿Es necesario aceptar y tomar alcohol en un contexto festivo o de celebración?
Se trata así de orientar al entorno y preguntarle si ¿es responsable de ofrecer alcohol a una embarazada e insistir en ello?
Esta campaña tiene como objetivo incitar a las mujeres antes de embarazarse y que beben alcohol regularmente, a comunicarlo al servicio de salud (Ginecólogo, Matrona, Médico de Familia, ecografista, etc.) informándoles para así prevenir y reducir los riesgos inherentes a la ingesta de alcohol. Existen equipos experimentados que atienden a las gestantes con dificultades y problemas de enolismo, facilitando y generalizando el acceso al sistema asistencial si ese es su deseo.
En Francia los medios accesibles son a través de un website y un teléfono.
Mejorar el mensaje sanitario
Que la cuestión de la información en las botellas de alcohol. En aplicación de la orden ministerial de 4 de octubre de 2006. Un mensaje sanitario destinado a las mujeres gestantes que preconiza la abstinencia durante el embarazo de todo tipo de bebida alcohólica. Este mensaje que toma diversas formas: como pictograma, en el que se ilustra el mensaje: “Cero alcohol durante el embarazo” en oposición a la frase informativa: “El consumo de bebidas alcohólicas durante el embarazo, incluso en pequeñas cantidades, puede tener consecuencias graves para la salud del niño”.
Mayoritariamente se utiliza el pictograma, pese a lo difícil que es reparar en él sobre la etiqueta/contra etiqueta.
Para aumentar el impacto del mensaje es mejor informar directamente a los consumidores realzando su visibilidad.
Por todo ello es muy importante plantear como prioridad preventiva en el marco del Plan Nacional de Prevención, incidir en la amplia difusión del mensaje y celebrar en los medios, de forma adecuada y notoria el Día mundial del Síndrome de alcoholización fetal para reforzar la toma de conciencia de los actores y suscitar la movilización de todos en pos de una auténtica apuesta de Salud Pública, desgraciadamente con una escasa respuesta y repercusión en nuestro país.
En España dos de cada 1.000 niños nacen con síndrome de alcoholización fetal.
Puede una mujer catadora de vinos, continuar ejerciendo su profesión, si queda embarazada?, y si solo cata el vino, poniéndolo en su boca, e inmediatamente lo escupe?
¿Que consecuencias tendría para el feto?
Puede, pero no debe. La absorción del alcohol tiene lugar ya en la boca pese a que no lo ingiera (en la cata se reitera la absorción con los distintos tipos de vino) por vía sublingual y a través de la mucosa oro faríngea (en la cata se baña con vino la mucosa yugal,malar y oro-faríngea).
Nuestro consejo es que suspenda su actividad de cata y la sustituya por otras actividades no nocivas dentro del mundo de la enología y de agente comercial ya que, seguramente cuenta con un enorme bagaje y background como sumiller pudiendo perfectamente sustituir su actividad de cata hasta alumbrar a su hijo evitando el riesgo de aparición de un Trastorno del Espectro alcohólico fetal y su propia afectación.
Recuerde también que:
El alcohol, es una sustancia que pasa directamente a la leche materna, al mismo nivel que la sangre materna, aunque también descienden rápidamente ya que el alcohol no se acumula en las glándulas mamarias. El alcohol inhibe la secreción de la prolactina durante dos horas, ésta hormona se encarga de la producción de la leche.
Los efectos del alcohol sobre el bebé dependen de la cantidad de alcohol que consuma la madre, ya que una cantidad pequeña de alcohol, menor de 0,5 gr/kg apenas causa daño, si es mayor a esa cantidad puede producir sedación y menor producción de leche.
La mujer elimina más lentamente el alcohol que el hombre, razón de más, por tanto.
No se sabe de ninguna cantidad de alcohol que la madre pueda ingerir durante el embarazo sin correr ningún riesgo. Ningún momento durante el embarazo se considera seguro para beber; de igual manera, no hay ningún tipo de bebida alcohólica que se pueda consumir en forma segura.