VENDIMIAS SOMBRÍAS

Cómo va a ir la vendimia en España en este 2024, hemos consultado en las distintas zonas vitícolas, recogiendo de las diversas denominaciones de origen las valoraciones de los técnicos de los Consejos Reguladores, habiendo sido iniciadas en unas y en algunas otras están en curso o previstas para su inminente inicio.
Veamos a continuación el resultado de nuestras pesquisas.

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Qué es la vendimia: un momento clave en la DOCa Rioja • Bodegas Marqués del Atrio (marquesdelatrio.com)

D.O. Montilla Moriles

En la madrugada del 17 de julio del año en curso, comenzó la vendimia en la zona de Montilla Moriles, con la recolección de las primeras parcelas con la variedad Chardonnay. En la actualidad andan con la Pedro Ximénez, variedad mayor en la zona, empezó a recolectarse durante la primera semana de agosto.
Las parcelas con verdejo y moscatel, prácticamente completaron el calendario de recolección de sus variedades tempranas destinadas a la elaboración de vinos monovarietales y de vinos tranquilos.
La estimación de la cosecha se halla por encima de la última campaña (26 millones de Kilos), la media de la zona está en unos 40 millones de kilos.
La calidad y la sanidad del cultivo son muy buenos y, sólo en algunas zonas en las que durante la floración hubo excesos de temperatura presentan algo de corrimiento de flor*, ocasionando disparidad en el tamaño de las uvas en el racimo. Aunque el efecto no ha sido ostensible en el ámbito territorial global.
Desde hace dos semanas las condiciones del clima se han vuelto extremas en comparación con la pasada primavera e inicio del estío (de gran bonanza); el comportamiento final del viñedo va a depender del clima que tenga lugar desde ahora hasta la cosecha. Pese a ello, el contraste de temperaturas noche-día ha beneficiado sustancialmente hasta ahora, el desarrollo del cultivo y de las uvas.
La elaboración de vinos destinados a vinos tranquilos y blancos para crianza se mantendrá estable y la elaboración de vinos dulces de uva pasificada, vino Pedro Ximénez, probablemente se incremente respecto a la elaboración de la anterior campaña.

D.O. Cebreros

Lo previsible era iniciar la vendimia en torno a la primera semana de agosto y, así fue, con la recolecta de la Albillo Real, prolongándose hasta mediados del mes de octubre para que la vendimia de la garnacha tinta en cultivos de altitud y los de las parcelas de la cara norte. Con un buen estado sanitario de la uva pese a verse el viñedo afectado por las heladas de finales del mes de abril, existiendo también, bastante corrimiento en la garnacha. Algunos viñedos de albillo real se afectaron por “millerandage*”.

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Según el estado del viñedo se esperan recoger 850.000 kilos de uva, una cifra parecida a la del año 2023.

D.O. Calatayud

Con la previsible vendimia en el mes de octubre es difícil hacer previsiones. Se trata de una cosecha media con cuajado irregular en la garnacha tinta, variedad mayoritaria en la D.O. Calatayud. Si bien hasta ahora no se ha echado en falta la lluvia, en el momento actual ya empieza a notarse. Desde el Consejo Regulador el cálculo es de unos 9 millones de kilos de uva (7,2 millones fueron en 2023). La sanidad es muy buena y el racimo suelto.

D.O. La Rioja

De acuerdo con el informe de evolución del viñedo, se observa que la integral térmica en lo que va de ciclo es bastante menor a la del pasado año, con valores y fechas más tradicionales, contrariamente a lo que acontece con los volúmenes de precipitaciones, en su mayor parte más cuantiosos.
Las reservas de agua se vieron favorecidas por las mayores precipitaciones durante la parada vegetativa (del 1.11.2023 al 31.03.2024). Con una brotación correcta y uniforme en las mismas fechas que la pasada campaña. Buena sanidad del viñedo, pese a las moderadas temperaturas a partir del 15 de abril que hizo temer por el oídio, pero sin llegar a preocupar al igual que con el mildiu, contrarrestado por el aumento de temperatura y la disminución de las precipitaciones así como por el buen trabajo de campo realizado. Las cuantías se prevén más reducidas respecto a campañas previas.

D.O. Ribera del Duero

Hasta esta primera quincena de septiembre no se prevé llevar a cabo la vendimia, siendo difícil el cálculo de su duración. Con un estado sanitario óptimo, a pesar de las inclemencias meteorológicas que tuvieron lugar en el mes de mayo.

D.O. Cava

Tras el trienio marcado por una persistente e intensa sequía, sus viñedos en pleno Penedés, se han recuperado sustancialmente con la lluvia primaveral. Se espera obtener una cosecha excelente respecto a sus parámetros cualitativos. Por la mitigación de la sequía y la capacidad de supervivencia de sus vides, de ahí la espera de una vendimia de muy alta calidad. El proceso de maduración es el adecuado. No obstante, el inicio de la vendimia no va a ser precoz, probablemente será posterior a las fechas de los dos últimos años, una vendimia larga y a la espera de buenas previsiones de calidad. La meteorología del presente año (precipitaciones y temperatura) hace que se prevea recoger uvas con una buena acidez y una composición fenólica adecuada para la elaboración del vino base para el Cava con un gran potencial para largas crianzas. La cosecha de 2024 viene marcada por un mayo y junio frescos y con precipitaciones puntuales, así como por una primavera y un verano con mantenimiento de temperaturas dentro de la media adecuada.

D.O. Rías Baixas

En su informe de previsión de vendimia en que se recoge y detalla la situación del viñedo hasta la primera quincena de julio, la estimación de recogida es de unos 41 millones de kilos de uva, es decir, un 7,5 % menos que la cosecha del año pasado y un rendimiento productivo más bajo, de unos 8.871 kilos por hectárea. Con unos racimos más pequeños, con retraso en el ciclo vegetativo de la vid debido a las condiciones meteorológicas de finales de mayo y de la primera quincena de julio, con temperaturas moderadas y frías para la época.
Se prevé que la fecha de inicio de la vendimia tendrá lugar (según evolucione el mes de agosto) durante los diez primeros días de septiembre (ahora precisamente). El envero empezó entre el 22 y el 28 de julio según el Departamento Técnico, con un incremento de 134 hectáreas en 2024 y una tasa de brotación del 92,7 % y un índice de fertilidad inferior (2,2 racimos yema brotados) y mermas atribuidas, se estima una media del 16 %, habiéndose producido un corrimiento de flor, plagas y enfermedades tales como el mildiu larvado. El ciclo de la vid en 2024 en la D.O. Rías Baixas contó con un invierno muy cálido y muy húmedo así como un junio normal y húmedo.

D.O. Alicante

La vendimia se inició a finales de julio en la D.O. Alicante (una de las zonas más precoces de España). Los viñedos de Novelda, en los que se cultivan el macabeo y el moscatel, están listos para entrar en bodega. La 92ª cosecha de la D.O.P Alicante. Campaña anual marcada por la grave sequía que asola todo el levante español, actualmente en máxima alerta y dificultades históricas de sus viñedos. La previsión se prevé inferior al mínimo registrado el pasado año (19 millones de kilos de uva), teniendo que aguardar hasta finales de noviembre, por la diversidad varietal y el largo ciclo vegetativo de la monastrell. Se espera vendimiar la próxima semana los moscateles en el Vinalopó y en la Marina Alta, esta última especialmente afectada por la sequía (no existe regadío).

D.O. Uclés

Las variedades blancas: Chardonnay, Viura y Sauvignon Blanc, ya fueron cosechadas sobre mitad de agosto. Las vides tienen un buen estado sanitario, pese a aquejar algún episodio de “ceniza”, por otra parte controlados. Llovió en primavera, siendo el grado de maduración muy bueno. La previsión es de entre un 20 y un 25 % de cosecha de uva mayor a la del año pasado.

Es una visión a vuelapluma de parte del viñedo español.

En Francia, la vendimia ya comenzó en el Jura, con una menor cosecha (merma entre el 60 y el 70 %) pero de buena calidad pero en cuantía muy insuficiente que pone en riesgo a más de uno de los cosecheros. Tras un año con un clima muy complicado, la uva es escasa, por ejemplo la savagnin, típica de este viñedo (se obtendrán 2 racimos por cepa, cuando lo habitual sería unos 15 racimos. En el 2023, la vendimia tuvo lugar a finales de agosto y este año se espera llevarla a cabo en estas fechas (10-15 de septiembre), ello es debido al episodio grave de heladas tardías que acaecieron del 22 al 25 de abril, con temperaturas nocturnas de – 1 º C que llegaron a quemar las hojas brotadas, haciendo perder el 60 % de la cosecha, lo cual tiene un gran impacto sobre el personal contratado, sobre todo en las pequeñas y medianas bodegas, muchas de carácter familiar que se ganan la vida elaborando vino. Determinadas bodegas que suelen emplear unas 45 personas, en la actualidad solo son 12.
En la Champaña, las lluvias y la humedad persistente han facilitado la propagación del mildiu, siendo vital tratar las vides para salvar y conservar las uvas del año 2025. Se trata de una pérdida histórica en los últimos 25 años, en palabras del director del Comité Interprofesional de Jura Wines, Olivier Badoureaux: “Una buena cosecha es de unos 80.000 hectolitros, pero este año, si logramos entre 25 y 30.000, ya será bueno. Afortunadamente, la calidad debería estar ahí”.