El Valle del Ebro desde Tudelilla. González Cosgaya.
Para celebrar el fin de semana tras 5 días de trabajo intenso en Santiago de Compostela nos escapamos a Moledo, en Caminha, Portugal, puro Atlántico.
Hay que madrugar, a las 6,30 en ruta hacia el sur, rodando por la Autopista del Atlántico, cruzando la Ría de Vigo por el puente de Rande, avistamos las Cíes al fondo y encaramos Vigo, en dirección hacia Portugal.
Repostamos en Tui, cruzamos su puente con una auténtica estimulación luminosa intermitente provocada por el sol al filtrar a través de su armadura metálica, llegados a Valença nos dirigimos a edificio status, en cuyo número 10 se halla Coisas Doces, en donde nos disponemos a desayunar:
El desayuno, un galão de café con leite, el bolo de arroz y las maravillosas turradas, que nos anuncia una buena jornada matinal.
Después nos dirigimos a visitar a nuestros informantes claves en materia vinícola para valorar de primera mano, novedades, precios e información sobre la próxima cosecha ya en ciernes. Monção y Melgaço nos quedan cerca.
Tras visitar las enotecas de la zona norte, en Valença do Minho y realizar alguna adquisición interesante, nos dirigimos a ese espacio natural en el que se reúnen, la naturaleza, la calma y el savoir vivre.
Con bandera amarilla en la playa y el viento del norte, bendecido por un brillante sol que nos hizo rehusar al baño preceptivo y optar por los 10.000 pasos de la eco ruta del norte, hasta la capela do Santo Isidoro, para afinar nuestro oído y también la mente.
De vuelta, nos encaminamos hacia Vilanova de Cerveira, en día feriado, sin adentrarnos en ella, yendo hacia Valença en donde cerramos alguna que otra compra, como la leche de Açores y el pan de Río Maior.
Ya se han hecho las dos de la tarde, el apetito hace su aparición y nos recuerda ese pequeño y a la vez gran gozo de alimentarse. Tenemos reserva en la deliciosa tapería De la manu, en el 40 (al final) del Paseo de Calvo Sotelo (en el mismo centro (estrenada su excelente reforma).
El menú elegido…
- La fresca y sabrosa ensalada de tomate con cebolla dulce, anchoas, queso de tetilla y vinagre de Módena.
- El exquisito salteado de pulpo con gambas.
- Escalopines al Roquefort.
- Tarta de 3 chocolates.
Lo acompañamos con un rosado:
- Ramón Bilbao Rosado 2019.
Ramón Bilbao Rosado es un monovarietal de Garnacha, procedentes de viñas viejas de viñedos de Tudelilla.
La elaboración de Ramón Bilbao Rosado empieza con una vendimia tardía que aprovecha el frío nocturno y las bajas temperaturas para evitar oxidaciones y mantener la limpieza del mosto.
Una vez en bodega la uva tinta entra en el depósito y macera durante cuatro horas. El mosto que se obtiene se trasiega en depósitos de acero inoxidable dónde, tras el desfangado, se efectúa una lenta fermentación a una temperatura baja de unos 14ºC.
La Rioja, el Valle del Ebro.
Ese tono tan a lo Provenzal.
Nota de cata
Tipo de producto: vino rosado.
País: España.
Zona de producción: La Rioja.
Cosecha: 2019.
Graduación Alcohólica: 12.5% vol.
Sabor: seco.
Aromas: a bayas, floral, afrutado.
Variedad de uva: tinta, garnacha.
Clasificación del vino: DO Calificada.
Acidez: 6.2 %.
Azúcar residual: 1,5 g/l.
Información sobre alérgenos: contiene sulfitos.
Información nutricional: vegano.
Temperatura de degustación: 7-10ºC.
Maridaje: aperitivos, queso.
Prohibida la venta a menores de 18 años.
Uvas cosechadas en la finca de Tudelilla.
Precio en tienda: 5.55€.
Precio en restaurante: 13€.
La uva procede de viñedos viejos plantados a una altitud de 600-700 metros en las áreas de Villalba y Tudelilla. Trago delicado que pinotea, cuerpo entre ligero y medio, mucha frescura de monte –regaliz, pino y jara– y un centro de fruta roja fresca (fresa) que pone el toque goloso de entrada, matizado por taninos algo silvestres que dan relieve. El roble aporta recuerdos de especias dulces en un perfecto segundo plano.
Nos deparó un buen momento gastronómico y personal.
MUSICANDO
El bien común
