Precariedad en el mundo de la cultura
Es importante la promoción de unas condiciones laborales específicas para un sector precario y mal regulado, igualando derechos. También lo es el regularizar situaciones de tal modo que al intentar dedicarse a la cultura nadie sea más que nadie, pero tampoco menos. La sostenibilidad y las condiciones materiales de las personas que se dedican a la cultura deben estar en la órbita del legislador. También han de estar en la voluntad sensible de los diversos públicos para evitar o paliar cuestiones tales como la intermitencia, la precariedad, los abusos contractuales, la salud laboral, el reconocimiento y la representatividad de las profesiones culturales.
La precaria representatividad de las profesiones en el debate cultural, deja a los sectores menos organizados fuera del mismo.
Contexto social de la cultura
Un aspecto sumamente relevante es el ámbito subjetivo de la aplicación de la norma. Esta debería incluir a las diversas personas, actividades y momentos del proceso cultural. Esto incluye quién crea la obra, qué es lo que ello exige (formación e investigación), quién diseña el escenario, quién lo ilumina, quién escribe la música y quién la ejecuta, quién la promueve, quién ilustra un poema y quién lo recita, quién comisaría el conjunto, quién lo hace llegar al público y, en general, quién sostiene todo el proceso con su trabajo visible, invisible o ambos a la vez.
Todas estas personas son indispensables para que disfrutemos de una obra de teatro, una vídeo instalación, un libro, una película, una ópera, un concierto. Sin ellas no pagaríamos el precio de la entrada, la descarga, el libro o la imagen. No tienen las mismas características, pero todas o casi todas se ven sometidas a las mismas situaciones socio laborales. También están sometidas a la misma intermitencia. También están sometidas a la perplejidad por el hecho de que trabajan, pero no tienen la posibilidad de mantener una relación laboral. Soportan también desigualdad entre hombres y mujeres, entre otras cosas.
Autosustento y cultura
Otro aspecto relevante es el que tiene que ver con el lugar de la cultura como trabajo intelectual en la vida cotidiana. Esto es, en el imaginario colectivo, el inconsciente social o como quiera llamarse. En la cultura, la vocación y la profesión mantienen una difícil relación cuando no contradictoria. En el ámbito cultural hay profesionales que lo son durante dos meses al año, los fines de semana, durante dos o tres años de su vida, o que dejan de serlo para volver tras una década. Esta es una casuística inabarcable por extensa. Cabe también decir que su nexo común es una vocación fuerte a veces compensatoria por sí misma. No siempre se evita el riesgo de estetizar la precariedad y de considerarla en sí misma «creativa». La cultura es algo maravilloso que debe protegerse y regularse.
Los derechos de los trabajadores de la cultura
Ha de ser posible dedicarse profesionalmente a la cultura. La cultura es un trabajo, y como tal debe remunerarse justamente, con sus derechos y obligaciones. Sea uno autor, intérprete, comisario, técnico o promotor este trabajo ha de permitir el autosustento. El cambio acelerado del mundo laboral, los soportes y condiciones materiales de la cultura se transforman continuamente. Poner la cultura a la altura del cambio social, tecnológico, tanto en lo laboral y fiscal como en materia de propiedad intelectual, es el auténtico reto que desborda al ámbito legislativo.
Fiar todo el cambio adaptativo solamente a una Subcomisión Gubernamental sería insensato. Esta no es más que una subcomisión del Congreso de los Diputados para la elaboración de un Estatuto del artista y de las/los trabajadores de la Cultura. Las derivadas sociales han de tenerse en cuenta. Esperamos que la diversidad de voces, la ampliación del concepto de cultura y la reubicación social de la cultura sirvan para avanzar hacia un modelo cultural diverso, accesible y sostenible.
Referencias
- http://ctxt.es/es/20170628/Firmas/13502/congreso-estatuto-artista-cultura.htm – Eduardo Maura, Portavoz de Cultura de Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea Congreso de los Diputados ctxt TRIBUNA Público nº 123 28.06.2017