Gabriela Marques, sumiller en el Ritz de Lisboa, renueva con brío la presentación de los grandes vinos portugueses.
Para admirar la hermosa Lisboa,rodeada de numerosas colinas como la ciudad eterna, conviene tomar altura y, nada mejor que registrarse en el Ritz, suntuoso palacio de los años cincuenta del siglo XX, edificado al lado del parque Eduardo VII. Decorado con tapices de Almada Negreiros, destaca su bar y los diversos salones con un encanto que apasiona.
En el restaurante, la conversación con Gabriela Marques, su sumiller, comenta que: “Es cierto que la sumillería es un universo sumamente masculino, siendo el número de mujeres presente en el mismo limitado, si bien el mundo del vino no está reservado únicamente a los hombres, de hecho cada vez existen más mujeres desempeñando este hermoso oficio”, esto cuenta en un día de bruma sobre el Tajo.
Por Manuelvbotelho – Obra do próprio, CC BY-SA 3.0, Hiperligação
GABRIELA MARQUES
De madre madeirense, realizó sus estudios en Lisboa. Ha recomendado un torrontés y una malvasía de Casa Barbeito (el Barbeito Madeira Bastardo 50 years sweet). La bastardo es una variedad portuguesa autóctona prima hermana de la trousseau francesa del Jura, que algunos viticultores del Duero están haciendo renacer, entre ellos la joven enóloga Rita Marques de la Bodega Conceito, en el valle del Tajo, logrando un vino elegante y sedoso, destinado a ser la estrella ascendente de la viticultura portuguesa.
Nombra también a Filipa Pato y Sandra Tavares, dos viticultoras que producen vino portugués, con uvas portuguesas y en terruños portugueses, nada más y nada menos.
Torrontés
Es la segunda variedad blanca autóctona más elaborada en el Ribeiro. Es propia de la zona y una variedad bastante completa que aporta ciertas peculiaridades organolépticas. Suele utilizarse para dar complejidad a las distintas mezclas siendo escasos los monovarietales. La brotación de esta cepa es precoz por lo que resulta sensible a las heladas primaverales que afectan a la zona algunos años y su ciclo de maduración es corto. Es bastante productiva, entre 14-15 Tn/Ha y presenta moderado desarrollo vegetativo siendo su zona de plantación más adecuada las tierras ligeras de ladera con cierta humedad. Es moderadamente sensible al mildiu y al oídio, y es bastante sensible a la Botrytis cinerea y al corrimiento.
Los vinos que produce son muy aromáticos y peculiares, con olores predominantes, frutales, florales y con notas de heno. Pueden alcanzar con facilidad 12 -13 grados de alcohol una conservación de la acidez total moderada que ronda los 4-5 gr/l. expresado en ácido tartárico. En boca son ligeros dejando un elegante y tenue recuerdo amargo. Tiene ligera tendencia a evolucionar con cierta rapidez, por lo que necesitan el aporte de variedades de mayor estructura y contenido ácido, siendo normalmente utilizada como complementaria, mezclada con otras variedades autóctonas a las que le aporta principalmente complejidad aromática y ligereza.